Valldemossa situado en la Sierra de Tramuntana, en la costa norte de Mallorca, es uno de los lugares más visitados y emblemáticos de Mallorca. Se trata de un pueblo y un paisaje de una extraordinaria belleza, para disfrutar paseando por sus calles empedradas y estrechas, cerradas al tránsito rodado. Sus orígenes se remontan a la dominación musulmana de Mallorca, con unas casas que representan una muestra de la arquitectura popular mallorquina, caracterizada por una gran sobriedad y sencillez de sus formas. Con las fachadas de piedra, muchas de las cuales presentan el portal de la entrada con un arco de medio punto. Algunas destacan por su decoración con piedrecitas incrustadas en el mortero. En la plaza Pública, la parte más antigua de Valldemossa, es donde se encuentran el mayor número de casas con tejas pintadas en la cornisa del tejado de la fachada, una característica frecuente en Mallorca, pero sobretodo en pueblos de montaña, fruto de supersticiones que pretendían proteger la casa y a sus habitantes de las desgracias.
La iglesia Parroquial de Sant Bartomeu se fundó en el siglo XIII, si bien su aspecto actual se debe a una serie de reformas y ampliaciones llevadas a término hasta el siglo XX. Con planta de cruz latina, cubierta por una bóveda de curcería con capillas laterales.
El oratorio de la Beata Catalina Tomàs, se encuentra en la calle del la Rectoría número 5. Esta fue la casa natal de la Beata Catalina Tomàs en 1531, que a su muerte fue convertida en oratorio. Su actual aspecto data del siglo XVIII.
El Port de Valldemossa es una vista increiblemente preciosa, yo voy en invierno, es cuando mas me gusta, y allí me olvido del mundo, es un paraiso.