El municipio de Alcudia se situada al noreste de Mallorca, ocupando la península que separa la bahía de Alcudia de la de Pollensa. Es uno de los lugares más atractivos de Mallorca, con extensas playas y parajes naturales únicos, como las zonas húmeda se la Albufereta al norte, que se mantiene prácticamente intacta de la acción del hombre, la Albufera Gran de Mallorca integrada dentro del Parque Natural de la Albufera, o el bosque y las montañas de Cap des Pinar. También se encuentran los restos de la época romana más importantes de Mallorca, la ciudad de Pollentia y su teatro, así como una muralla medieval y numerosos yacimientos prehistóricos.
El pueblo de Alcudia tiene un carácter medieval, pasearse por las calles estrechas del casco antiguo, habilitadas para peatones, nos traslada a otra época. Donde se pueden contemplar casas sencillas con siglos de antigüedad, construidas siguiendo los cánones de la arquitectura tradicional de Mallorca, junto a otras más señoriales de origen gótico o renacentista, que invitan al visitante a descubrir los pequeños detalles, que la historia ha ido dejando a lo largo de los siglos. Las murallas medievales son la característica más singular de Alcudia, fueron mandadas construir por el rey Jaume II el 1298, con la finalidad de defender Alcudia y utilizarlas como refugio para los habitantes de las poblaciones próximas. Se trata de un recinto poligonal de planta irregular, con el llamado camino de ronda en el interior conservado en buen estado, con diversos accesos a las torres y a las murallas, en el exterior se conserva buena parte de la fosa que protegía la ciudad. También se conservan dos de las puertas de entrada, la de Xara al norte de Alcudia, desde donde salía el camino hacia el muelle y la de Sant Sebastià, también llamada de Mallorca, que se encuentra a la entrada de Alcudia cuando se llega des de Palma. En 1660 se terminaron de construir las murallas renacentistas del segundo recinto, desmanteladas a finales del siglo XIX, debido a su mal estado de conservación. Actualmente quedan algunos restos dispersos, y el Baluard de Sant Ferran, que forma parte de la plaza de Toros.
La primitiva iglesia parroquial de Sant Jaume fue construida en el siglo XIV, si bien en febrero de 1870 unas fuertes lluvias provocaron el hundimiento de buena parte del edificio. A raíz de este hecho se construyó el actual templo, de estilo neogótico de una sola nave cubierta con bóveda de crucería y capillas laterales, donde se guardan retablos con pinturas y esculturas góticas y barrocas. En una de las dependencias de la iglesia está el Museo Parroquial, que contiene numerosos objetos litúrgicos y obras de arte religioso.
El Ayuntamiento situado en la calle Major 9, es uno de los edificios destacables con una torre, donde se ubica un reloj y un campanario. En el vestíbulo se pueden observar fotografías antiguas, de diversos lugares del municipio de Alcudia.
El oratorio de Santa Anna se encuentra situado delante del cementerio, en la carretera que une Alcudia y Artà, a unos quinientos metros de Alcudia. Es una pequeña iglesia construida en la segunda mitad del siglo XIII, aprovechando los restos de la ciudad romana de Pollentia. Es de estilo gótico de planta basilical, de una sola nave cubierta por una bóveda de medio punto en la cabecera y vigas de madera en el resto. En la fachada principal resalta una escultura de la Virgen María de la Bonanova con el niño Jesús.