El próximo día 7 de febrero la Federación de Dimonis, Diables i Bèsties de foc de las Islas Baleares, ha convocado una manifestación en Palma. Esta asociación no es una secta satánica ni nada parecido, sino una organización que agrupa la larga lista de grupos de demonios, que hay en Mallorca, Menorca y Ibiza. El diablo forma parte de muchas fiestas populares de las islas, representando el mal vencido por el bien, personificado en el santo de turno. Estos personajes son mucho más que una representación del mal, también son el aspecto lúdico de la fiesta, a quienes les está permitido casi todo, convirtiéndose en los auténticos protagonistas.
Los bailes y espectáculos de demonios, son una tradición muy arraigada en las tierras de habla catalana, así como en otros lugares del Mediterráneo. Se cree que tienen su origen, en representaciones teatrales de la Edad Media. En verano son muchos los pueblos de Mallorca, que con motivo de las fiestas patronales organizan correfocs (traducido literalmente sería corre fuegos) con abundante pirotecnia. Y aquí es donde ha surgido la polémica, que ha provocado la convocatoria de esta manifestación, ya que la directiva 2007/23 CE del parlamento Europeo, limita extraordinariamente el uso de la pirotecnia en espectáculos públicos, poniendo en peligro la celebración de los tradicionales correfocs.
El sábado los dimonis tomaron las calles de Palma y se dejaron oír. Más de trescientas personas se manifestaron desde la plaça de España hasta la de Cort para pedir que la norma europea de pirotecnia no acabe con los correfocs. En la marcha, sin fuego, participaron una veintena de colles venidas de todos los rincones de Mallorca.
En Cort se leyó un manifiesto, en el cual se explicó que con la entrada en vigor de la directiva del Parlamento Europeo sobre artículos pirotécnicos, prevista para el 2010, «supondría la desaparición de las colles infantiles de dimonis y bestiario de fuego, ya que no se podrá usar material pirotécnico hasta los doce años» y que «el público no podrá participar activamente en los correfocs porque aumentarán las distancias de seguridad de forma desmesurada».