El baile de los Cossiers es una danza popular de Mallorca, llegada desde Cataluña y ampliamente documentada desde el siglo XIV. La tradición se ha mantenido viva en Algaida y en Montuïri, si bien en otros pueblos como Manacor, Alaró, Pollensa y Palma de Mallorca se ha recuperado.
Los danzarines son tres parejas de hombres y una dama, vestidos de blanco con una faldilla de colores vivos y una faja de la cual cuelgan cintas y trocitos de espejo. En cada mano llevan un pañuelo que sirve para las figuras coreográficas. Van acompañados del demonio, la figura que intenta desbaratar la ceremonia con sus impertinencias, el cual se convierte en el elemento festivo y humorístico de la representación. El contrapunto al demonio es la dama, la cual representa el bien, que tiene la función de dirigir los movimientos de todos los cossiers. La música del baile es interpretada por gaiteros, y un músico con flauta y tamborcillo.
En Algaida actuan el día de San Honorato, el 16 de enero.
En montuïri actuan el día de San Bartolomé el 24 de agosto.