El centro histórico de Palma, con un trazado medieval de calles estrechas y tortuosas, es la parte más interesante para el visitante, donde se concentran la mayor parte de los monumentos de Palma de Mallorca. Está separado del ensanche, por las avenidas. Unas calles anchas, que ocupan el lugar de las antiguas murallas renacentistas, derruías a principios del siglo XX. Los restos que quedan, se pueden ver en la vertiente marítima del casco antiguo, en el Baluard del Príncep, delante de la Seu y en el Baluard de Sant Pere. En el interior de los aparcamientos subterráneos de Vía Roma, también se puede observar un fragmento de la muralla. En esta parte de la ciudad, es donde antiguamente vivía la nobleza mallorquina, en casas que son verdaderos palacios, las cuales ocupan un lugar destacado en su trazado urbano. De la misma manera que las iglesias y los conventos.
La plaza de Espanya y el parque de Les Estacions, forman un nexo de unión entre la parte antigua de la ciudad y la más moderna, siendo el centro neurálgico del transporte urbano, desde donde salen los trenes y autobuses, hacia los pueblos y centros turísticos de Mallorca.
El conjunto monumental de la Seu y el Palacio de la Almudaina, se ve reflejado en las aguas del lago artificial del Parc de la Mar. Antiguamente el mar llegaba hasta los pies de la muralla, hasta que se ganó el terreno que ahora ocupan el parque y la carretera que pasa por delante. Dentro del recinto del Parc de la Mar destaca, un gran mural cerámico de Joan Miró, entre otras obras de arte. En la parte de arriba de un portal de la muralla, hacia el parque se encuentra el relieve de un ferrocarril. Esta era la salida del túnel, que antiguamente comunicaba por ferrocarril la actual plaza de Espanya con este lugar, donde llegaban los barcos de pasajeros entre la calle de La Portella y el Parc de la Mar se encuentra la Portella medieval, un portal en la muralla que presenta un arco rebajado con una clave en la bóveda con las cuatro barras de la bandera catalana y aragonesa. Esta puerta ya formaba parte del recinto musulmán, y debe su nombre a sus reducidas dimensiones. Algunos metros más allá, hacia el Parc de la Mar, se encuentra la Portella moderna, integrada dentro del último recinto renacentista fortificado de Palma de Mallorca, que data de 1785.
Al pie de la Seu se encuentran Ses Voltes, un recinto con un patio central rodeado de murallas, con algunas cámaras cubiertas por bóvedas de medio punto, de donde el espacio obtuvo su nombre. A lo largo de los siglos, desde su construcción entre los años 1774 y 1801, ha tenido diversos usos militares. Actualmente es un espacio escénico al aire libre y un centro de exposiciones temporales que también aloja una muestra permanente de pintura mallorquina de los siglos XIX y XX, con obras de Joan O´Neille, Antoni Ribas, Joan Bauçà, Ricard Anckermann, Antoni Gelabert, Santiago Rusiñol, Hermenegild Anglada Camarassa, entre otros.
Detrás de la Seu, en la plaza del Mirador, 5 se encuentra el Palacio Episcopal, empezado a construir inmediatamente después de la creación de la diócesis mallorquina en 1238. Su concepción es gótica, si bien a lo largo se la historia ha sufrido importantes reformas. El edificio se configura con una planta rectangular alrededor de un patio, presidido por una estatua del Corazón de Jesús. En la misma plaza, formando ángulo con el edificio del Palacio Episcopal, se encuentra el Oratorio de Sant Pau, de principios del siglo XV y de estilo gótico. En la calle de Sant Bernat, 1 se encuentra el Hospital de Sant Pere y Sant Bernat, edificio que en el año 1475 fue destinado a hospital para capellanes pobres. La fachada presenta tres grandes portales barrocos, que se podrían inscribir dentro del estilo rococó.
En la calle Almudaina, se encuentra la puerta de la Almudaina, correspondiente a una de las puertas de la muralla romana. En la época musulmana daba acceso a la zona residencial al-Mudayna, de donde proviene su nombre. Es muy probable, que las características esenciales de su estructura, procedan de una reconstrucción hecha durante el siglo V, si bien tiene elementos atribuibles a la época islámica y algunos añadidos góticos.
A los pies del Palacio de la Almudaina, en la parte de poniente de la avenida Antoni Maura, está el Hort del Rei. Desde tiempos inmemoriales constituía el huerto del palacio real, de donde proviene su nombre. Actualmente es un espacio abierto, con unos magníficos jardines donde se pueden contemplar varias esculturas, de autores como Subirachs (Jònica) o Joan miró(Dona). Dentro del mismo recinto se encuentra el arco de la Drassana, con una luz de 18 metros en forma de arco semicircular, ligeramente elíptico. Esta era la entrada al astillero real musulmán, de manera que los emires mallorquines, tuvieron un puerto bajo los pies de su residencia. Testimonio del poder naval que llegó a tener la Medina Mayurca (Ciudad de Mallorca, en árabe), durante la época musulmana.
El Passeig del Born, es un espacio urbano relevante dentro de la ciudad de Palma de Mallorca. Presenta características del urbanismo tradicional junto con elementos clasicistas y románticos, donde destaca el gran palacio barroco de Can Solleric, convertido actualmente en sala de exposiciones. El sentido histórico de la palabra ´born´ hace referencia, al combate en campo cerrado de caballeros, que se celebraban en este lugar. Los terrenos que ocupa, constituyeron antiguamente una estrecha cala donde desembocaba el torrente de la Riera. En el año 1613 el torrente fue trasladado a su actual ubicación en el Passeig Mallorca, para evitar la mortandad que su desbordamiento causó a lo largo de la historia, en sucesiva ocasiones, como en las lluvias de 1403, recordadas como Lo Diluvi (El Diluvio), que asoló 1500 casas y produjo unas 5000 víctimas. En 1833 se realizó una importante reforma, que dio lugar a su aspecto actual. Fue en este momento, cuando se colocaron las esfinges, conocidas popularmente como las leonas. En uno de sus extremos, en el centro de la plaza Joan Carles I, se encuentra la Fuente de las Tortugas, erigida en conmemoración del juramento como princesa de la futura reina Isabel II. Presenta una taza circular y un obelisco hecho con piedra de Santanyí, coronado por un murciélago de bronce, símbolo heráldico de la ciudad y sostenido por cuatro tortugas de bronce. En este lugar, es donde se reúnen los seguidores de los equipos de fútbol, para celebrar sus victorias.
La Avenida de Jaume III, supuso la obertura de una vía ancha dentro de la ciudad antigua, para conectarla con el ensanche de poniente. Tiene un trazado rectilíneo y uniforme, con arcos porticados y fachadas homogéneas. Es una de las vías comerciales más activas y exclusivas de Palma de Mallorca. En la calle Concepció, una travesía de la avenida Jaume III delante del Centro de Cultura Sa Nostra, se encuentra la fuente del Sant Sepulcre, que conserva el cuello de una fuente árabe del siglo X y un templete del siglo XIII.
El origen del passeig de la Rambla, actualmente llamada Rambla Dels Ducs de Palma de Mallorca, es la desviación del lecho del torrente de la riera en 1613, de acuerdo con el proyecto de la construcción del recinto fortificado, de las murallas renacentistas. Tiene aproximadamente unos 300 metros de longitud y un trazado rectangular, con una fuente en la parte de arriba y la escultura ´Lugar de encuentro V´ de Eduardo Chillida, en l aparte de abajo junto a dos estatuas de emperadores romanos, instaladas el año 1937 en homenaje a la Italia fascista. A lo largo de su recorrido, hay múltiples paradas donde se venden flores. En 1841 se trasladó allí el mercado de los sábados, el cual desde la edad media se venía celebrando en la cercana plaza del Mercat, donde también hubo el zoco de la ciudad musulmana. Actualmente el mercado de los sábados se realiza en los alrededores de la avenida Gabriel Alomar i Villalonga.
En la plaza Weyler, 33 se encuentra el Gran Hotel, un establecimiento de lujo precursor del turismo en Mallorca. Actualmente es un centro cultural, sede de la Fundación la Caixa en Mallorca. Contiene una exposición pictórica permanente, dedicada a Anglada Camarassa. El edificio fue terminado de construir en 1903 y representa una de las obras más importantes del modernismo en Mallorca, con una fachada ricamente ornamentada con elementos escultóricos y cerámicas. Al otro lado de l aplaza, se encuentra el Forn del Teatre, testimonio del modernismo catalán, aplicado a la decoración exterior de un local comercial. Un poco más abajo, en los números 13 y 14 de la plaza del Mercat, hay dos edificios simétricos la pensión Menorquina y el edificio Casasayas, adscritos dentro de la tendencia modernista del ´Art Nouveau´.
El edificio de la Misericòrdia, institución benéfica dedicada a acoger indigentes, ocupa el solar del antiguo cementerio del Camp Roig y fue empezado a construir aproximadamente en 1677, pero las obras se alargaron hasta el siglo XIX. Actualmente depende del Consell de Mallorca, donde están las oficinas de Cultura y Deportes, un centro cultural, la biblioteca de Cultura Artesana y la Biblioteca Lluís Alemany i Vic. Al edificio se puede acceder desde el jardín, donde se han instalado algunas esculturas de artistas contemporáneos, en la Via Roma, o bien desde la plaza del Hospital donde se encuentra el Hospital General. Construido en el siglo XV, de acuerdo con la tendencia de la época de centralizar todos los hospitales de una misma localidad. La estructura del edificio es compleja y heterogénea, debido a las numerosas modificaciones sufridas a lo largo de los siglos. Hoy en día, todavía es un hospital. Dentro del mismo conjunto se encuentra la iglesia de la Sang, con una talla del Sant Crist de la Sang, que goza de gran devoción en Mallorca.
La Plaza Major, es el centro neurálgico del casco antiguo, donde llegan las principales calles comerciales para peatones, como son la calle Sant Miquel, Jaume II o la calle del Sindicat, que se extiende hasta la zona comercial de la avenida Alexandre Rosselló en el ensanche. El espacio que ocupa es el del antiguo convento de Sant Felip Neri y algunas casas vecinas, además del lugar donde hasta el 1823 estuvo la sede de la Inquisición, la Casa Negra, que fue abolida el año 1820. La plaza tiene planta rectangular y el perímetro porticado, sobre el cual se alzan tres y cuatro pisos. Una vez derruida la casa de la Inquisición, pasaron diez años antes que se iniciasen las obras de la primera ala, que fue terminada en 1838. Las obras se alargaron hasta bien entrado el siglo XX, con la construcción de un aparcamiento subterráneo y unas galerías comerciales. Saliendo hacia la plaza del Marquès del Palmer, en el número 1 se encuentra el edificio de l´Àguila el cual comparte la estructura metálica del cuerpo interior con Can Rei, dos edificios de principios del siglo XX , construidos siguiendo el modelo del modernismo modernismo Catalán, con una abundante decoración en las fachadas, donde destacan las cerámicas policromadas de la fábrica mallorquina ´La Roqueta´.
En la plaza de Cort, el nombre de la cual proviene de la concentración en este lugar de gran parte de las cortes o curias de los señoríos jurisdiccionales, y de las diversas magistraturas abolidas por las Cortes de Cádiz en 1811. Aquí se encuentra el edificio del Ayuntamiento, el cual originariamente alojó el hospital de Sant Andreu, fundado el año 1230 por Nunyó Sanç, a partir del año 1249 fue sede de la Universitat de la Ciudad y del Reino de Mallorca, el organismo de gobierno municipal desde mediados del siglo XIII hasta que el Decreto de Nueva Planta lo substituyera por el Ayuntamiento en 1716. La construcción del actual edificio del Ayuntamiento se inició en el año 1649 y se alargó hasta mediados del siglo XVIII, reproduce el modelo de la casa señorial mallorquina tradicional de tres pisos. La planta baja tiene dos portales laterales, con escudos barrocos y una tribuna central con el nombre popular de banco de los vagos o del Sinofos, sacado de la expresión ´si no fos per…´ (si no fuera por…), que se supone que decían los vagos de la ciudad, excusándose para no ir a trabajar. En la parte de arriba de la fachada, hay un reloj conocido popularmente con el nombre de En Figuera. En el interior de la planta baja destacan el portal gótico del antiguo hospital de Sant Andreu, y la escalera que conduce a la planta noble. Aquí se puede conocer a Tòfol y a Francinaina, los dos gigantes la Sala, nombre con el que se conoce al Ayuntamiento.
Al costado del edificio del Ayuntamiento, en la calle del Palau Reial está la sede del Consell de Mallorca, un edificio empezado en el año 1882 y que representa una de las mejores realizaciones del neogótico mallorquín. Un poco más abajo hacia el paseo del Born, en la calle Conquistador, 11 se encuentra el antiguo local del ´Círculo Mallorquín´, actualmente sede del Parlamento de las Illes Balears. El edificio ocupa los terrenos del convento gótico de Sant Domingo, derruido en el año 1837, con motivo de la desamortización de Mendizábal. En la misma calle se encuentra el Palau March, actual sede de la Fundación Bartomeu March Servera, que contiene un belén napolitano del siglo XVIII y un conjunto de esculturas contemporáneas.
El barrio de la Gerraria, antiguamente fue un centro artesano muy activo, con los gremios de los alfareros y los herreros, con un gran nombre de talleres de estos oficios. Recientemente todo el barrio ha sido reestructurado, con la construcción de los juzgados de primera instancia y la creación del Passeig de l´Artesania (Paseo de la Artesanía), en los alrededores de la plaza de la Artesanía, donde se han instalado comercios y talleres de artesanos. En la plaza de Quadrado, 9 se encuentra el edificio modernista de Can Barceló, del cual destacan las cerámicas policromadas, confeccionadas en la fábrica ´La Roqueta´, que nos transmiten un mensaje del espíritu burgués. En el mismo barrio se encuentra la Plaza de la Quartera, donde durante siglos, al menos desde el siglo XV, estuvo el edificio destinado a depósito del grano de la ciudad. Era una institución esencial en épocas de crisis, debida a las malas cosechas en la isla, cuando lal alimentación dependía de las importaciones de trigo, el llamado «trigo del mar». Aquí era almacenado, custodiado, cribado y distribuido. En la parte de poniente, ya dentro de la calle de la Corderia, está la espartería Ca la Seu, fundada en 1510, uno de lo establecimientos más antiguos de la ciudad.
El Call Major, barrio judío desde el final del siglo XIII al XV, ocupaba una extensa zona del sureste de la ciudad antigua entre el Temple, Sant Francesc y la Calatrava, si bien en la época musulmana y durante la mayor parte del siglo XIII, el Call estaba al lado de la Almudaina, en la actual calle del Palau Reial. Sus habitantes formaban una parte diferenciada del resto de la ciudad, ya que el barrio era un recinto cerrado, rodeado por un muro. Hubo dos sinagogas, una a principios del siglo XIV, estaba en el solar que actualmente ocupa la iglesia de Monti-sion y la otra en el edificio del actual Seminari Vell (Seminario Viejo), al lado de la cual estaban las escuelas hebraicas. En 1435 los judíos de Mallorca fueron obligados a convertirse al cristianismo, año en que formalmente se acabó el judaísmo en Mallorca. Los descendientes de una parte de estos judíos conversos conocidos como ´Xuetes´, marcados por una serie de apellidos, que adoptaron de sus padrinos en el momento del bautismo, generalmente nobles y mercaderes cristianos, han estado marginados en la sociedad mallorquina hasta los años sesenta del siglo XX. Siendo uno de los puntos más oscuros, de la historia de Mallorca. Su red de calles estrechas y callejuelas, configuran uno de los barrios populares más representativos de Palma de Mallorca.
El Puig de Sant Pere es el antiguo barrio de poniente de la ciudad, entre el Baluard de Sant Pere, la Drassana la y la iglesia de Santa Creu. Es uno de los barrios más antiguos y típicos de Palma de Mallorca. Ha sido durante siglos un núcleo de pescadores, marineros y artesanos relacionados con la actividad de los astilleros. Conserva el trazado viario del urbanismo musulmán. Del edificio del gremio de pescadores, en la calle de Sant Pere, 25, solamente queda el portal renacentista de la capilla. El Baluard de Sant Pere, es uno de los elementos más importantes de las murallas renacentistas, donde actualmente se ubica el museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Palma. Conserva restos del sistema hidráulico, destinado a proveer agua a los barcos anclados en el puerto, como los arcos de la acequia y un gran aljibe. También conserva una torre de origen islámico, de planta cuadrada. En este barrio se encuentran los edificios de la Llonja y el Consolat de la Mar, institución representativa de la actividad náutica y comercial de otras épocas y, actualmente sede de la presidencia del Gobierno de las Illes Balears. En el paseo Guillem Sagrera, está la puerta Vella del Moll, que estaba al final de la calle de la Mar y constituía el principal acceso a la ciudad por vía marítima. Hoy solamente nos ha llegado el arco de entrada, el cual fue trasladado a su actual ubicación , cuando las murallas fueron derruidas. Entre la calle de la Mar y la plaza de la Reina, se puede ver el arco de la Gabella de la Sal, el cual formaba parte del cuarto recinto de murallas, originarias del siglo XII, en la época musulmana.
Latest Comments