Formentor es una una estrecha península, en el extremo norte de Mallorca dentro del municipio de Pollensa, que se alarga unos 12 km y llega ha tener 3 km de ancho, recorrida por una carretera que conduce hasta el faro del Cap de Formentor. Es uno de los lugares más visitados y emblemáticos de Mallorca, gracias a la belleza de un paisaje que conjuga el mar con la montaña. Siguiendo la carretera antes de llegar a la playa, hay dos lugares desde los cuales se pueden contemplar espléndidas panorámicas, uno de ellos es el mirador de la Creueta con el islote del Colomer al fondo, una de les panorámicas más fotografiadas de Mallorca, el otro es la Atalaya de Albercuix, construida a finales del siglo XVI, formaba parte del sistema de defensa de Mallorca . Situada sobre una cima de 390 m por encima del nivel del mar, a la cual se llega mediante una carretera que se desvía de la principal.
La presencia del hombre en Formentor se remonta a la prehistoria. En la época romana hubo un poblado dedicado a la producción de lingotes de hierro bruto, ya que este es un elemento característico de algunos lugares de esta zona, donde desde la edad media hubo una de la propiedades más extensas de Mallorca, a pesar de la dificultad para cultivar la tierra, a la cual se añadía el problema de la piratería, hasta que los franceses no tomaron posesión de Algeria. Prueba de ello es el edificio de la vieja casa de Formentor, que presenta características de una auténtica fortificación.
En 1928 Adan Diehl, miembro de una adinerada familia argentina, relacionada con la banca Trocquist, compró las tierra de Formentor, enseguida junto con su esposa iniciaron la construcción de una lujosa residencia, que se convirtió en el emblemático Hotel Formentor inaugurado un año más tarde. Entre los clientes de esta primera época de esplendor, interrumpida por la Guerra Civil Española, hubo escritores y artistas de reconocida fama a la vez que personajes como Winston Churchill, Eduard Windsor, príncipe de Gales, Niceto Alcalá Zamora, el duque de Alba, el Marahja de Kapurtala entre otros. No es hasta los años cincuenta, cuando el Hotel Formentor se vuelve a convertir en escenario de actos internacionales, como el primer congreso internacional dedicado a la figura de Ramon Llull. En 1960 se concedió el Premio Formentor de Novela, el más bien dotado del mundo en aquellos tiempos con 10.000 dólares y la edición internacional de la obra premiada, al cual acudieron destacados novelistas y editores. En los años noventa se celebró una reunión de los primeros ministros de la Unión Europea. Actualmente sigue siendo un hotel exclusivo.
Cala Formentor es una playa dividida por un muelle utilizado por las embarcaciones de turistas. Cubre un área de aproximadamente 900 m de largo por 10 m de ancho, con arena blanca de textura fina. Delante de la playa se encuentra la pequeña isla de Formentor, y en la parte de atrás hay un pinar que protege de los rayos solares. Para llegar hay un autobús desde el Puerto de Pollensa. En coche se puede llegar siguiendo la carretera PM-221 en dirección hacia Cap de Formentor, está bien indicado. Hay un amplio espacio destinado a aparcamiento, el cual no es gratuito.
Servicios; Un bar al aire libre donde se sirven comidas, duchas, hamacas, sombrillas de playa y velomares para alquilar.